Pensar en qué escribirás es buen ejercicio.
De tí, por tí, contigo, para tí.
Ni idea, espero paciente y me causa gracia este estado de falso sosiego, cuando quiero pedirte a gritos que apures al teclado, respiro profundo y considero que no ha de ser sencillo externar pensamiento, sentimiento e historia, le llamas caja de Pandora. Y sí, resulta que al escribir, destapamos lo que en esencia y espíritu somos, porque es el único recurso con el que cuenta quien se atreve a plasmar en signos gráficos las manifestaciones de ser él mismo, al romper huellas y cadenas heredadas o adquiridas. Festejo tu valentía. No sé cuánto esfuerzo ha de requerirte; leerte valdrá la pena.
Por lo pronto, tu huella literaria es densa.
Querida mía, esta semana fue de reminiscencias. Te he extrañado. Sin embargo, soy algo tímida y no me atreví a escribirte. ¿Cómo estás? Han pasado tantas cosas además del tiempo. Te beso con infinito afecto.
ResponderEliminarVolvemos a encontrarnos, gracias por pegarme un toque de atención. He andado perdido, no han sido tiempos fáciles, no lo están siendo en este país que parece que cada vez es de más miserias y tampoco lo han sido a nivel personal. Te escribo.
ResponderEliminarHola... siempre es bello pasar por tu espacio, leerte y dejar mi huella.
ResponderEliminarTe abrazo
MentesSueltas